Una alternativa que busca brindar apoyo a la población menos aceptada por la sociedad por su condición diferente, que los hace ver como discapacitados, pero son personas que tienen las mismas capacidades que todos, sólo que su proceso intelectual requiere de la ayuda y de la responsabilidad de todos. ¿Estás listo para servir?
Está no es una historia más de servicio a la sociedad es, tal vez, la oportunidad para conocer a las personas que buscan ayudar a quienes más lo necesitan, pero sobre todo, a esas familias que han dejado de ser visibles para el gobierno.
Seguramente todos en sus hogares llevan una cruz, esa persona que requiere del total apoyo y cuidado de nosotros, pero sobre todo, de un amor infinito que logre llenarlo, a tal punto, que su pago sea una sonrisa gigante de agradecimiento por el buen trabajo que hacemos.
Soy testigo de que pocas personas han llenado sus bolsillos por servir al mundo. Para ellos sólo queda la satisfacción de que han podido ser diferentes del resto y han comprendido el verdadero significado de la vida.
En esta ocasión tres personas quisieron emprender algo grande que marcaría por siempre la historia de muchas familias y nunca se imaginaron que una simple reunión de amigos, en una tarde donde vieron la necesidad de ayudar, fuera hoy la labor más especial que harían el resto de sus vidas.
Me atrevo a decir que todos hemos conocido alguna vez niños con Síndrome de Down, discapacidad intelectual e hiperactivos que han puesto nuestro corazón ‘arrugadito’ porque, tal vez, muchos de ellos son aislados por la misma sociedad, por su condición diferente.
Llegan para ayudarte
Fundación Sin Límites nació hace tres años como una iniciativa para contribuirle a los niños con discapacidad intelectual y de escasos recursos económicos con pocas o nulas posibilidades de acceder a la rehabilitación y el cuidado que requieren para poder ser personas a quienes se les dé el mismo trato.
Todo inició como un voluntariado donde tres personas hacían actividades deportivas todos los sábados de 10:00 de la mañana a 12:00 del mediodía, a las cuales asistían niños desde los 6 años y jóvenes de 20 en adelante, con el propósito de disfrutar de un rato de esparcimiento.
Al principio solo eran 10 chicos, después de un tiempo la cantidad se triplico, a tal punto que las cosas empezaron a salirse de control porque no estaban preparados para tan grande acogida por parte de los padres de familia.
“Nunca nos imaginamos que esto llegaría a tantas personas, nos vimos en la necesidad de que las cosas fueran legalmente constituidas para poderles brindar a los padres de familia, un mejor servicio. De ese voluntariado que iniciamos como porque si, nació la idea de crear una fundación donde uniera trabajo, entrega y corazón”, dijo con orgullo Luis Fernando Cuellar, representante legal de la fundación.
Muchas personas alguna vez han querido crear sus propias fundaciones, porque les gusta la parte social, otros, juzgan y presumen que las fundaciones son parte de enriquecimiento, pero otros simplemente se lanzan a hacerlo y la satisfacción que obtienen es gigante.
Hacerles entender a las personas que ellos también son parte de la sociedad, es un proceso que requiere de tiempo, sobre todo, porque las mismas familias se han encargado de hacerlos ver como discapacitados, especiales o enfermos que no tienen solución.
Una iniciativa diferente
Una propuesta que ha hecho que esta iniciativa sea diferente al resto, es que buscan la inclusión a través del juego el cual se convierte en un mecanismo más fácil para que ellos aprendan.
En un lapso de tres años han participado en los Juegos Supérate de los intercolegiados donde hay un espacio para ellos y han logrado llegar a la parte nacional que es lo máximo que hay en esta fase deportiva.
Para los emprendedores de Sin Límites, es la posibilidad de que muchos de los niños que hoy buscan divertirse, el día de mañana puedan llegar a ser personas con resultados, visionarios y que tengan la capacidad de trabajar y, de la misma manera, recibir un reconocimiento por sus labores.
Sus sonrisas, agradecimientos y alegrías pagan cualquier sacrificio que se ha tenido que hacer para llevarles a ellos lo mejor. Por ejemplo, Fernando recuerda aquella vez que uno de sus ‘polluelos’ participó en unos de los eventos más importantes como lo es el ‘Special Olimpyc’ en Los Ángeles, California, donde de su Fundación salió Julián Flórez en representación de Santander y Colombia, allí ganó medalla de bronce en los 200 metros planos, en atletismo, la mejor recompensa que se logró con mucho esfuerzo.
Sin límites
Sus metas no paran en solo tener a cierta cantidad de chicos, Sus sueños no tienen límites. Se proyectan a poder tener su propia sede donde asistan muchos niños de todas las regiones de Santander y puedan brindar, en su propia Fundación, los espacios de recreación y esparcimiento, pero que se incluyan pequeños con y sin discapacidad intelectual.
El compromiso es de todos. Padres y comunidad en general, no tengan miedo de mostrar a sus hijos con esta condición diferente, que si bien es cierto, aunque te digan que no va a servir, debes entender y comprender que, ante todo, son humanos y que el mejor trabajo empieza para ti.
Mayor información pueden a través de la página web www.fundacionsinlimites.com, o mediante la red social de Facebook: Fundación Sin Límites a la inclusión.
Celular: 315 629 3534
Por: Carolina Torrado Duarte. Periodista/ELFRENTE
Tomado de: https://www.elfrente.com.co/web/index.php?ecsmodule=frmstasection&ida=61&idb=116&idc=14570